Las formas curvas, que evocan a la penillanura uruguaya levemente ondulada, son el núcleo del concepto que Carlos Ott imaginó para el Museo de Arte Contemporáneo Atchugarry.
Desde Picast trabajamos en la materialización de este concepto en la envolvente, con perfiles rectos y curvos creados en GRC color natural, que funcionan como cerramiento del edificio, y le dan su característica forma.
El mobiliario e interior también debían seguir las formas curvas para lograr un vocabulario homogéneo en toda la obra. Por eso también se optó por el GRC para la escalera interior, por su capacidad de reproducir morfologías onduladas con mayor detalle.
Carlos Ott es conocido por su audacia en la creación de formas distintivas y por integrar tecnologías avanzadas en sus diseños, por lo que trabajar con él supone siempre un enorme orgullo. Su impacto en la arquitectura contemporánea se manifiesta en la diversidad de sus obras, que abarcan desde edificios culturales hasta desarrollos urbanos, dejando una impronta duradera en la escena arquitectónica global.